viernes, 25 de enero de 2013

¿Quo vadis Terra?

Llevo trabajando con Terra bastantes años, desde que tuve Internet gracias a un módem V90
¡Impresionante!



Puede que los más jóvenes del lugar, que no conocieron otra cosa que la ADSL, se extrañen de pensar en que algunos nos conectábamos por la misma línea del teléfono (no multiplexando, como la ADSL)
Cuando se usaba Internet, no se podía llamar por teléfono y viceversa. Luego llegaron las tarifas planas y, finalmente, ADSL. Entonces no hablábamos de megas en el ancho de banda. Eran "Ks" y no muchas, por cierto.

La historia de Terra daría para mucho. De ser una Start-Up a caer en picado no hubo mucho trecho. Terra, Lycos y todo esto. Cuentos del abuelo Cebolleta y mucho dinero perdido para algunos.

Pero este repaso arqueológico-telecomunicativo no es el tema central de esta entrada del blog.


La cuestión es que, hasta hace poco yo tenía un espacio web gratuito de Terra y una cuenta de correo igualmente gratuita.

Terra nos avisó que el espacio web iba a desaparecer y nos daba un plazo para acceder, si así lo deseábamos para retirar los contenidos subidos. Así lo hicimos y el espacio web Terra ya no existe.
No fue una gran pérdida pero es posible que sea sólo el preludio de algo peor.

Mi dirección Terra, que he usado siempre, que he dado a todos mis amigos y que considero mi dirección oficial (aparte de las ocho o nueve "oficiosas" que tengo) ha empezado a dar muestras de cambio. A peor.

Yo nunca le pedí a terra.es que tuviera la capacidad de almacenamiento de GMail, ni sus funcionalidades ni nada por el estilo. Sólo correo. Que funcionara. Y hasta ahora fue así.

Tengo un amigo, bloggero que anda por ahí (igual lee esta entrada y todo) a quién no le puedo mandar correo desde Terra. Su proveedor, que tampoco es para tirar cohetes, clasifica mis correos como spam. No sé hasta que punto es culpa de terra, o de otro proveedor, mucho más pequeño.
Pero, al final, ambos utilizamos cuentas de GMail. No pasa nada, pero me molesta tener que utilizar dos cuentas para un mismo fin.

Otra cosa que sucede al correo Terra es que tienes limitados los destinatarios. Bueno, tiene su razón, evitar el spam. Pero si mando un correo a 20 personas, tal vez sean amigos, compañeros de trabajo, vecinos o esté organizando un evento. Eso ¡no es spam!
Salvo para Terra. Como mande un correo a más de 10 direcciones, tengo que hacerlo en dos envíos.
Eso es una incomodidad que no tengo porqué sufrir.

Pero la gota que ha colmado el vaso fue ayer. Preparé un correo para dos personas por una cuestión técnica, y adjunté tres fotos. El correo, en sí, no era muy grande. Y el número de destinatarios, digo yo que no era sospechoso.

¡Pues no hubo forma de mandarlo con Terra! Naturalmente, a punto de perder los estribos, me configuré en el Outlook una cuenta de GMail y el correo salió echando chispas.

Dicho esto, señores de Terra, si la calidad de su servicio de correo empieza a bajar por debajo de un mínimo aceptable, habrá que cambiar de correo. GMail, Outlook (antes Hotmail), Yahoo o GMX por nombrar los más conocidos, dan correos gratuitos, POP3, IMAP, WEB y sin problemas de adjuntos, de destinatarios o de cosas raras.

Una pena, porque confieso que le tengo cierto cariño a mi dirección de Terra por ser la que me ha acompañado durante muchísimos años. Pero, de forma progresiva, iré informando a mis contactos y migraré a GMail.

¡Adios Terra! Fue bonito mientras duró. Te echaré de menos, pero lo nuestro ya no funcionaba y no por mi culpa.