domingo, 8 de junio de 2014

Esto no sirve. Y como no sirve hay que cambiarlo.

El otro día nos llamó un usuario para pedir que se cambiara determinada aplicación.
El usuario alegaba, no sin falta de razón, que a la aplicación le faltaban determinadas funcionalidades y que, ante cualquier problema, le habían indicado que se pusieran en contacto con nosotros.

Dicha aplicación llevaba ya funcionando años y que, hasta ahora, nadie se había quejado.


Cierto que todas las aplicaciones son mejorables y que muchas veces se incorporan características solicitadas por los usuarios en un natural proceso de evolución.

También es cierto que un usuario puede quejarse de que la aplicación no funciona, pero si no funciona como espera o desea que lo haga, debería ser bastante evidente que ese tipo de cambios se solicitan al superior jerárquico, no directamente al personal informático.


No quita que a veces, errare humanum est, los compañeros de desarrollo hayan metido la pata.

Sin embargo, me llamó la atención el caso y decidí acercarme personalmente.

El usuario, que no tenía por que ser consciente de mi casi total desconocimiento de dicha aplicación, me describió el problema con absoluta claridad. Es cierto que no podía hacer lo que necesitaba y que trabajar en esas condiciones era penoso y poco productivo.
Pero yo, sin conocer la aplicación, vi el icono de una hoja excel. Aquí sí que tenía ventaja porque había visto (y utilizado) otras aplicaciones de la casa y por tanto supe inmediatamente su función pero -incluso sin saberlo previamente- ¿para qué podría servir invocar una hoja de cálculo desde una aplicación?

- Ves, así puedes exportar esos datos a un excel y podrás manejarlos mejor.

El usuario no daba crédito a sus ojos pero, aún dentro de la sorpresa, no llegaba a comprender qué clase de magia haría el excel por él. Aparte de tener una actitud poco dada a probar, el excel no era su fuerte.

- Nos vamos al menú de datos... y así podemos ordenarlos por columnas

Aquí ya le cambió la cara ¡Por fin podría trabajar! Sin embargo, aunque tuvo buen cuidado de disimularlo, tengo el convencimiento de que, interiormente, sintió algo de vergüenza.

- Es que es mi primer día aquí...

Tal vez los responsables de la embarazosa situación fueron quienes dejaron a una persona delante de un puesto de trabajo bajo la consigna "nada o húndete", pero tampoco es de recibo cuestionar el trabajo de otros, cuando el problema es causado por la propia ignorancia.

Si uno no sabe utilizar una herramienta, antes de quejarse y cuestionar la herramienta debería intentar aprender a usarla.

En todo caso, la parte técnica acaba aquí y no entraré a valorar los motivos laborales y personales que nos llevaron a esa situación.

lunes, 7 de abril de 2014

Correo corporativo. La historia interminable.

En cualquier organización que se precie, existen unas normas de uso del correo corporativo.
La primera y general es que el correo sólo debe usarse para fines propios de la organización y en ningún caso para cuestiones personales.

Gracias a la popularización de servicios de correo como GMail o Yahoo, normalmente casi todo el mundo tiene su cuenta personal absolutamente separada de la cuenta profesional. Empieza a ser raro utilizar una sola cuenta para todo aunque, sin duda, algo de ese pasado reciente queda.

Siempre hay algún enterado que usa su cuenta corporativa para registrarse en alguna web porno o de sorteos. Pero, con todas las precauciones, podemos decir que son los menos.

También ¡gracias a dios! se ha reducido en gran medida la molesta costumbre de reenviar a toda tu lista de correos todos y cada uno de los chistes, powerpoints y demás basura que a uno le llega.
Habrá que agradecérselo a Facebook y otras redes sociales, y también a los filtros anti-spam.

Por tanto el correo corporativo, casi siempre, se usa para fines corporativos. Ni más ni menos.

Del mismo modo, en casi todas las organizaciones hay alguna lista de distribución llamada "todos", "global", "general" o similares. Es innecesaria explicar cual es el sentido y utilidad de dicha cuenta.

Lo que ocurre es que, al final, alguien la utiliza para algún fin no previsto, con toda su buena fe.

from: jperez@organizacion.es
to: todos@organizacion.es
Asunto: Aviso de virus.
Hay un nuevo virus que no puede ser detectado. Si entra en el disco duro destruirá toda la información y además te saldrán almorranas. El FBI, los marines y Chuck Norris ya están trabajando pero todavía no hay una cura.

La respuesta suele ser del tipo:

from: informatica@organizacion.es
to: todos@organizacion.es
Asunto: Re: Aviso de virus
Por favor, no os hagáis eco de los rumores que circulan sobre virus. Nuestro antivirus está actualizado y disponemos de diversas medidas de seguridad para reducir el riesgo de infección. Pero si tenéis información que pueda ser útil ponéis en contacto con nosotros en informatica@organizacion.es para que valoremos si es necesario avisar a todo el mundo, bla, bla, bla...

Luego están las cadenas solidarias:

from: mgarcia@organizacion.es
to: todos@organizacion.es
Asunto: Niño muy enfermo necesita nuestra ayuda.
Me han asegurado que por cada e-mail que reenviemos Microsoft donará 10 ¢ a la fundación de investigación de la neuropatía cervical angioplástica. Así salvaremos la vida de Yonatan.

 La respuesta suele ser

from: direccion@organizacion.es
to: todos@organizacion.es
Asunto: Uso del correo electrónico
Se recuerda a los empleados de esta compañía que el uso inapropiado del correo electrónico puede ser objeto de medidas disciplinarias que no quisiéramos vernos obligados a aplicar y bla, bla, bla...

Pero la casuística es casi inagotable.

Está el que empieza diciendo "ya sé que no debería usar el correo corporativo para ésto pero..."
Luego el despistado "Si alguien ha visto una mochila de color azul..."
El publicista "Vendo Seat León TDI. A toda prueba..."

Y, ¡por supuesto! los MUY despistados

from: nvidal@organizacion.es
to: todos@organizacion.es
Asunto: orgía en mi casa el fin de semana
Hola chicos!
Os paso las foto de la fiesta del finde. Al final Margarita López no encontró sus bragas, ja, ja, ja...

Con su correspondiente Flamming

from: mlopez@organizacion.es
to: todos@organizacion.es
Asunto: Re: orgía en mi casa el fin de semana
Eres un cerdo y un mentiroso, no iría contigo ni a la vuelta de la esquina

from: jperez@organizacion.es
to: todos@organizacion.es
Asunto: Re: Re: orgía en mi casa el fin de semana
¿Pero no os dais cuenta que nos estais mandando el correo a todo el mundo?


from: mgarcia@organizacion.es
to: todos@organizacion.es
Asunto: Re: Re: Re: orgía en mi casa el fin de semana
¡Para la próxima  a ver si invitais!
 
Y luego los correos piadosos

from: rrhh@organizacion.es
to: todos@organizacion.es
Asunto: Despedida de Ignacio Vidal
Lamentamos comunicar que el Señor Vidal causa baja en nuestra empresa.
Le deseamos mucha suerte en su nueva etapa profesional

Y no podían falta en este breve catálogo los correos que incluyen faltas de ortografía que harían llorar a Miguel de Cervantes. Cuando uno lee algo así como "Haber si podeis revisar la fotocopiadora" no sabe donde meterse.

Quién no sepa distinguir a + ver de haber merece morir. Pero eso sería otro tema, no desvirtuemos éste que seguiremos desarrollando más adelante...

jueves, 6 de marzo de 2014

Los ficheros de usuario

En las organizaciones con servidores de ficheros y sistemas de backup los usuarios suelen tener mapeadas una o dos unidades de red como mínimo.

La típica U:\ de usuario y luego una compartida que suele llamarse P:\ o S:\ o T:\

Puede haber más unidades compartidas pero la filosofía de trabajo es sencilla.
En la U:\ el usuario guarda ficheros y documentos que normalmente sólo él usa y en la S:\ aquellos que suele usar o consultar más gente.

Como en el disco duro local el espacio no suele ser problema, se suele tolerar que el usuario guarde allí sus cosas personales. No de trabajo. Bajo la advertencia de que SOLAMENTE se hará backup de las unidades de red y en ningún caso de su disco duro con lo cual, los informáticos, no se harán responsables de la pérdida o borrado accidental de ficheros estrictamente personales.

En algunos casos, como cortesía, se les suele facilitar la grabación de sus ficheros en DVD si no lo tuvieran en sus PCs.

Reconozco que hace muchos años que no veo problemas por falta de espacio en disco local, puesto que el almacenamiento en disco duro es bastante barato y han surgido alternativas en la nube para que la gente guarde sus ficheros.

Pero de todo hay.






Normalmente los informáticos no solemos ser demasiado beligerantes con lo que guardan los usuarios en sus discos duros. Se supone que al trabajo se va a trabajar, no a descargarse cosas ni a volcar el contenido de la tarjeta SD al PC corporativo. Pero no es problema nuestro lo que el usuario hace en sus horas de trabajo... a no ser que lo sea.

Pero a pesar de todo esto, un día se descubre que los discos de red están al máximo y se empieza a revisar la cuota de disco.

Hay gente que tiene unos pocos KBs. Otros del orden de MBs. Pero la mayoría de la gente se ajusta  a un promedio hasta que ¡sorpresa! nos encontramos a los usuarios que tienen varios GBs de información.

Si el jefe tiene 10 GB, por algo será. Es el jefe. Fin de la cuestión.
Si revisas la unidad de un administrativo y tiene 6 GB es porque tiene muchos documentos enormes todos ellos. Estamos ante el caso de alguien que no quiere borrar nada. Si le pides la contabilidad de 1956 seguramente también la tendrá.

Pero ¡eureka! llegamos a un usuario típico, sin nada de especial en su trabajo pero con una carpeta llamada "Cosas mías". Entras y ¡8 GB!

Encuentras las fotos de su boda. Las fotos de la boda de su hermano. Sus vacaciones en Thailandia. Con los hijos en Disneyland Paris. En la barbacoa en el chalet de su hermano. El cumpleaños del tio Mariano. Los hijos en el triangular de futbito...

Por supuesto más libros electrónicos que en la Biblioteca de Alejandría ¿pero tendrá tiempo este hombre para leer tanto? Yo necesitaría varias vidas tan sólo para hojear la mitad de todo...

Por descontado Queen Greatest Hits 2, Shakira, "Hey" de Julio Iglesias y discografía suficiente como para escuchar sin parar durante tres o cuatro semanas. MP3 a porrón.

Pero esto no es todo... a ver esa carpetilla medio escondida de nombre P... ¡Sí!
¡Películas! El hombre sin sombra, La carga de la brigada ligera, Ender's Game, Gravity, Los Juegos del Hambre e incluso alguna un poquito más delicada como "Enfermeras traviesas IV" o "Cuatro para una" sin tener nada que ver con Los Mosqueteros.

Ante eso, y dada la legendaria paciencia y discreción de los informáticos y para evitar ser causa de un despido procedente, normalmente se llama al usuario en plan paternalista...

- Hola, Pepito.
- Sí.
- Mira, soy Juanito de Informática. Es que estamos revisando el almacenamiento en red porque nos estamos quedando sin espacio, tú tienes un montón de gigas ocupados y...
- ¡Ah! ¿Y no me podéis poner otro mayor?
- ¡Qué mas quisiéramos pero de momento no hay presupuesto!
- ¿Y qué podemos hacer?
- Igual puedes borrar algunos archivos viejos que ya no uses...
- Vaya, pues es que necesito todo...
- Bueno, no importa. Se lo comentamos a tu jefe y que él solicite un servidor nuevo para...
- ¡Noooo! Tampoco quiero molestarle. Además habéis dicho que no hay presupuesto. Habrá que borrar algunos ficheros que no voy a usar.
- Vale pues si necesitas que te echemos una mano nos lo dices...
- No. No es necesario. Ya me encargo yo.
- O.K. pues muchas gracias.
- Gracias a vosotros

¡Y arreglado!